Oposiciones. Aspira siempre al 10

Alguien dirá: “Sí claro, el 10, bastante es si apruebo…” ERROR. Los que estamos en este mundo sabemos que una oposición es un camino duro, donde lo que importa es resistir, ser perseverante y destacar por encima del resto. Eso solo se consigue yendo a por el 10, siempre.

Los que se inician en este mundo pueden pensar que conseguir aprobar y entrar en una bolsa es más que suficiente. Sinceramente, con ese espíritu el camino va a costar el doble. Porque el que estudia para salir del paso, para aprobar justito, estudia a medias y eso no garantiza el éxito en un proceso de estas características.

Es cierto que en función del tipo de oposición el espíritu, la motivación, pueden no ser la misma. No es lo mismo presentarse a un concurso-oposición sin tiempo trabajado y muy pocas esperanzas de lograr plaza que a una oposición pura y dura con un número elevado de puestos a nuestra disposición. Pero la experiencia demuestra que aún con todas las probabilidades en contra es posible lograrlo, la plaza o al menos una posición en bolsa que nos permita meter cabeza y empezar a trabajar, al fin y al cabo ese es el objetivo final.

Solo es posible lograrlo si nos colocamos entre los mejores de los mejores y para esto no hace falta ser el típico estudiante modelo con una trayectoria de sobresaliente desde la Escuela Infantil. Los límites nos los ponemos nosotros mismos, si toda la vida hemos sido estudiantes mediocres por lógica vamos a pensar que una oposición no está hecha para nosotros ERROR. Como explicaba aquí, con una motivación clara y una meta que se quiere alcanzar sí o sí, hasta el peor estudiante se puede convertir en un número uno.

En un proceso selectivo como este, casi tan importante como estudiar y saberse el temario es la actitud con la que encaremos la oposición. La mentalidad positiva, el creer que lo vamos a lograr, visualizarnos incluso en nuestro destino, nos va a allanar el camino. No se trata de crear falsas expectativas, pero sí de mantener alta esa motivación imprescindible para que los resultados sean los esperados.

Para concretar, aspirar al 10 es sencillo solo hay que tener estos factores en cuenta:

• Prepara a conciencia cada tema.
• No analices el temario pensando qué parte puedes dejar.
• No abandones las partes más duras porque no vale la pena perder el tiempo.
• No te quedes con dudas por miedo a plantear preguntas tontas.
• No dejes de repasar tema tras tema.
• No hagas caso a los que intenten desanimarte.
• No renuncies nunca.

En definitiva eso es lo que nos diferenciará del resto. Un punto, una décima, es decisiva. Marca la línea entre tener una plaza y no tenerla, entre trabajar o seguir viendo con llaman a esos que sí se lo estudiaron todo, a esos que preguntaron todas las dudas, hasta las más absurdas, a esos que repasaban y repasaban hasta tener claros todos los conceptos. En una oposición sea del tipo que sea, hay que tener ambición, buscar la máxima nota, porque, poniéndonos bíblicos: “Los empollones heredarán la plaza”.

Llegará un día que saldrá una lista y veamos nuestro nombre, que suene el teléfono y las puertas laborales se abran de par en par. Y ese día te darás cuenta de lo importante que fue no tirar la toalla, lo importante que fue seguir estudiando con la misma intensidad pese a saber que las posibilidades era muy pocas, lo importante que fue aspirar al 10, y conseguirlo.

¿Cómo lo veis? ¿Tenéis esa actitud de cara a una oposición? ¿Cómo mantenéis alto el espíritu del 10?