Oposiciones: 5 ideas para cuando no apetece estudiar

Has creado tu rutina, te levantas y te pones con los apuntes, llegas a casa y no faltas a tus horas de estudio. Enhorabuena, la oposición forma parte de tu vida, es un trabajo más. Pero esto no significa que siempre lo vayas a tomar con el mismo ánimo ¿verdad? De hecho habrá días en los que tendrás que hacer un esfuerzo sobrehumano para empezar a estudiar y como, por ahora, no te da de comer ni tienes más jefe que tú mismo es fácil que pienses en escaquearte, “total por un día…” Para ayudarte a que no lo hagas aquí te ofrezco cinco ideas con las que superar el momento: “no me apetece nada”.

Date un premio. Por qué no, estudiar una oposición es un trabajo pero sin recompensa inmediata, así que dátela tú. Tómate una taza de chocolate, comprar ese capricho que viste, date un baño relajante, juega un rato a la consola, sal a pasear… Se trata de que sea algo que te guste pero que no hagas muy a menudo. Todos conocemos nuestros pequeños placeres, posponlo para el momento en que acabes de estudiar. Lo recomiendo para los días especialmente duros ya que darte todos los días un premio acaba perdiendo efectividad, además de la línea si está relacionado con la comida…

Cambia tu entorno. “Otra vez me tengo que meter aquí a estudiar, ¡qué agobio!”. Este problema lo podemos solucionar fácilmente, cambia tu lugar habitual de estudio. Puedes probar en tu dormitorio, en el salón o incluso en la cocina. También te puedes ir a la biblioteca y si hace buen día coge los apuntes y vete al parque. Hay veces que solo necesitamos cambiar un poco el lugar para volver a conectar y recargar pilas. Quien sabe, igual descubres que asimilas mucho mejor la información con el sonido de la fuente de fondo.

Dibuja. Si, y no me refiero a ponerte en plan Dalí, sino a que cojas los apuntes y hagas diagramas, cuadros, esquemas… Todo con muchos colorines y flechas. Precisamente hace poco leí una frase atribuida a Einstein: «Si no puedo dibujarlo, es que no lo entiendo», pues eso. Es otra forma de estudiar, te va a ayudar a recordar y retener mejor mientras pasas un rato muy ameno con las pinturas, pensando como encajar cada contenido. Cuando acabes tu obra ponla en un lugar bien visible, al final de tanto verla se te meterá en la cabeza. Es un método útil para exámenes de reconocimiento como los test pero también para los de desarrollo ya que te ayuda a organizar el tema en tu mente y después es más fácil plasmarlo en papel.

Cambia de rutina. En este caso nos quedamos en nuestra habitación de estudio pero variamos el programa que seguimos. Si normalmente nos dejamos los test para el final cambiemos y empecemos por ello. Se trata de alterar un poco la rutina con tal de no aburrirnos y perder por tanto el interés. Una estrategia útil puede ser organizar la semana haciendo cada día una cosa, un día esquemas, otro repaso, otro test, otro me voy a la biblioteca… Y cuando nos cansemos le damos otra vuelta.

Navega por internet. Estás seguro de que ponerte hoy delante de los apuntes no te va a servir de nada, pues enciende el ordenador. No se trata de que te pongas a chatear o a ver vídeos de gatitos. Busca exámenes anteriores, ejemplos prácticos, comprueba las leyes por si ha habido cambios, investiga en los foros especializados, consulta dudas, busca información sobre cómo afrontar la prueba… Puedes hacer muchas cosas relacionadas con tu oposición y que son también muy importantes de cara a aprobar el examen.

Pues hasta aquí mis cinco soluciones para seguir estudiando ante un eventual bajón. Me gustaría conocer más ¿me las cuentas?