Yo sí quiero que mis hijos den besos

Esta semana hablaba de como los niños son percibidos por una parte de la sociedad como algo molesto, algo a lo que se puede prohibir la entrada a los restaurantes, algo pasajero que cuanto menos incordie mejor. Claro está que no comparto esta opinión, los niños por propia definición no pueden alzar la voz ni orquestar grandes campañas para que se hagan valer sus derechos como personas. No pueden votar, no pueden ir sentados en el autobús, no tienen dinero propio y muchos noes más. Aún así tienen obligaciones: deben obedecer a sus padres, cumplir con las tareas escolares y portarse bien. Aquí incluyo desde no dar la nota en un restaurante (de los que sí les dejan entrar), hasta no ir chillando por la calle o cumplir las normas básicas de cortesía y educación.

Y es en este punto, mientras reflexionaba sobre la necesidad de que los niños sean respetados y se integren en la sociedad en la que viven sin verse privado de derechos, cuando recordé un artículo de hace un año y que recientemente volví a ver, se trata de Por favor no le pidan besos a mis hijos. Es una lectura que va en la línea de lo que comento, los niños son personas a las que hay que respetar e igual que a ti no te gusta que te den besos sin tu consentimiento no le pidas a tu hijo que lo haga. A raíz de ese escrito surgieron apasionados defensores del “si mi hijo no quiere dar un beso está en su derecho, no le voy a obligar”.

Queremos que nuestro hijo solo de besos a quien quiera y cuando quiera, pero también queremos que nuestro hijo viva en esta sociedad y sea respetado. El problema es que formar parte de esta sociedad implica interactuar, implica dar besos a conocidos aunque no te apetezca, implica aguantar al primo que acabas de conocer y ponerle buena cara, implica cruzar dos frases con el vecino aunque llegues tarde… Son las normas de cortesía, los buenos modales o como queráis llamarlo.

Ahora me diréis “estoy lo tengo que aguantar yo que soy adulto, no voy a hacerle pasar a mi hijo por eso”, pues sí y no, ¿acaso no va todos los días al colegio aunque no le apetezca? va porque es lo que tiene que hacer. Mi hijo pequeño es tímido con las personas que no conoce bien, no solía saludar cuando le decían hola y menos dar un beso. Nunca le he obligado pero luego le explicaba que hay que responder a los saludos y si el yayo te pide un beso se lo das, poco a poco va perdiendo timidez y el “hola” le sale natural. Porque yo quiero que mis hijos sepan desenvolverse en el medio que les ha tocado vivir, sepan ser agradecidos y demostrar afecto a las personas que les quieren. Por eso insisto en el saludo, en las gracias o en besar a la tía abuela que lo adora o a la vecina que siempre le hace galletas.

Está claro que hay límites, con mi hijo mayor me pasaba lo contrario, saludaba hasta a las piedras y daba la mano, besos y lo que hiciera falta aunque acabara de conocer a la persona. En este caso mi estrategia fue distinta, alabé su simpatía pero desde bien pequeño le mostré la importancia de controlar el contacto físico con los demás. En concreto utilicé el cuento de Kiko y la Mano, lo podéis ver y descargar aquí.

Estoy de acuerdo con que un beso es un acto íntimo y personal que damos a quien queremos cuando queremos, pero en nuestra sociedad el beso también es un acto de cortesía y una muestra de respeto y no veo nada malo en enseñárselo desde que son pequeños. No hay que hacer nada especial, somos el cristal en que se miran, el simple ejemplo les sirve. Y que conste que no soy precisamente besucona y no me gusta que desconocidos se muestren cariñosos con mis hijos aunque no dejo que se convierta en una paranoia que acabe convirtiendo a los niños en unos asociales temerosos del mundo. Quiero que sigan besando a abuelos y tíos, quiero que no pongan cara de susto si un amigo mío les pide un beso y quiero que sepan decir NO cuando realmente sea necesario. No creo que sean cosas incompatibles ¿o sí? ¿qué os parece?

 

11 comentarios en “Yo sí quiero que mis hijos den besos

  1. Yo siempre he sido poco besucón, pero si recuerdo de pequeño que me obligaban a dar un beso a todo el mundo y eso no me gustaba… No quiero que mi Peque le pase lo mismo y si no quiere dar un beso tampoco quiero obligarlo, por el momento al cabo de un rato lo termina dando.

    No impongo que de un beso, le pregunto si quiere dar un beso para ello cambio la frase «dale un beso» por «Le quieres dar un beso» en alguna ocasión tenemos que terminar la frase «lo guardamos para luego».

    Si quiero que mi hijo de besos, y eso intentamos, pero no quiero que le obliguen o se sienta obligado a ello.

    Me gusta

  2. Me parece que tienes mucha razón. La verdad es que mi hijo aún es muy pequeño, y aunque le pidan un beso si él no quiere no le puedo obligar, se me escapa de las manos! Pero sí que me parece una costumbre de educación que hemos mamado desde siempre y que lo tendrá que hacer en su día. Jamás le obligaré (nunca digas nunca, pero no es mi intención obligarle) pero sí que le enseñaré ese acto educado. Los niños hacen lo que hacemos y si nos ven dando besos ellos lo terminarán viendo normal. Me ha gustado mucho tu reflexión. Un beso!

    Le gusta a 1 persona

  3. Pingback: Maternidad estricta, maternidad permisiva… ¿Y la tercera vía? |

  4. Creo que es lo más sensato que he leído sobre si obligar a los niños a besar a alguien para saludarlo o no. Mi peque también es muy tímida y no le digo nada si no quiere besar a alguien que no conoce mucho, eso sí, hay que decir hola o adiós. pero cuando no quiere dar besos a los abuelos, tíos… eso ya no es por timidez y la verdad es que le insisto bastante y ahora con todos esos posts diciendo que no,que no, que ella es dueña de su cuerpo… me estaba volviendo un poco tarumba. Muchas gracias por hacerme recobrar la cordura.

    Le gusta a 1 persona

    • A ti por leerme. La verdad es que en estos temas pasamos de un extremo a otro sin darnos cuenta y cuanto más leemos más nos mareamos, pero bueno al final solo hay que aplicar un poco de sentido común. Saludos!

      Me gusta

  5. El colegio es una obligación y comparar con dar besos me parece falta de sentido común. Entonces porque nosotros no damos besos a todas las familias???? Es que ellos tienen que hacer y nosotros no!!! A mi me parece una falta de respeto hacia los niños y a su vez una hipocresía. Porque somos nosotros quien tenemos que dar el ejemplo. No. Yo a mi hijo no le obligó y yo soy así. Yo aveces me molestaba que mi madre me obligará a dar besos a gente que a ella le apetecía. Es más luego entonces el niño verá normal hasta que venga un pervertidos y …..

    Le gusta a 1 persona

    • Hola. Estoy de acuerdo que no se puede obligar a dar besos si el niño realmente no quiere. Lo único que planteo aquí es que en muchas ocasiones los besos son una forma de interacción social, la forma que tenemos de saludarnos y convertir esto en una cruzada contra la libertad de los niños me parece exagerado. Pero es solo mi opinión.
      Muchas gracias por aportar tu visión.
      Saludos!

      Me gusta

  6. Pues yo seré una rancia, pero doy besos si me apetece, sino no, doy la mano o nada. No creo que se tenga que obligar a nadie dar besos… esta bien ser cortés y educado y enseñar a los hijos que hay que saludar y dar las gracias. Pero no creo que haya necesidad de dar besos si el niño no quiere. Obligarlo no. No porque yo misma como adulta no me apetece dar besos a desconocidos. Asi que si un niño no se siente comodo en ese momento dar dos besos a un adulto, no lo voy a obligar. Saludos, tu blog es muy interesante!!!

    Le gusta a 1 persona

Deja un comentario